Mons. Colombo: ‘Testimoniar lo grande de Dios en la vivencia de la fraternidad comunitaria’

El arzobispo de Mendoza hizo ese llamado durante la misa dominical en un templo de la localidad de Godoy Cruz, donde reflexionó sobre el pasaje evangélico de la Transfiguración del Señor.

El arzobispo de Mendoza, monseñor Marcelo Colombo, presidió una misa desde la cuasiparroquia San Cayetano, de la localidad mendocina de Godoy Cruz, donde reflexionó sobre el pasaje evangélico de la Transfiguración del Señor, en el que Jesús se encuentra con sus apóstoles y los apóstoles, con la gloria de Jesús.

“Es muy hermoso imaginarnos ese encuentro con la gloria de Cristo, y darnos cuenta de cómo el Señor tiene para sus apóstoles y para sus discípulos esos momentos de máxima luz; donde lo conocemos y donde sabemos que Él es quien nos asegura todo bien y quien satisface más hondamente nuestras necesidades”, destacó.

El arzobispo mendocino subrayó el mensaje que el Papa Francisco les dio a los jóvenes reunidos en la reciente JMJ de Lisboa, en relación con la Encarnación de Cristo: “María partió y fue sin demora. Ella, dice el Papa, conocida la noticia de la Encarnación, no se quedó, no se contempló a sí misma”, puntualizó.

“Utilizando un lenguaje de nuestra época, no se sacó una selfie, sino que quiso ir al encuentro de su prima Isabel”, agregó, y completó: “Así también, los apóstoles no podían quedarse, les tocaba ahora volver a los hermanos y, sin poder decir mucho, testimoniar lo grande de Dios en la vivencia de la fraternidad comunitaria”.

“Nosotros también hemos sido invitados a nuestros encuentros con Cristo glorificado. También nosotros tenemos en cada misa un encuentro con la gloria de Cristo, que se hace palabra, pan y vino; y también en los momentos difíciles de la vida, Él se ha revelado como consuelo y esperanza de caminantes. Por eso, en cada transfiguración celebramos la gloria de Dios, que es para nosotros Cristo, el Señor”.

Monseñor Colombo invitó a no dejar de considerar “la obra de Dios en sus santos y el testimonio que ellos dieron en vida, con sus obras, del significado del Dios con nosotros”.

“Demos gracias a Dios por la visita del Papa a Lisboa, por el encuentro mundial con los jóvenes, y pidamos especialmente, por intercesión de San Cayetano, que no falten en nuestras casas la paz, el pan y el trabajo”, concluyó.+